La diferencia entre primavera y otoño son personas, refugio. Son hojas que se caen por un motivo y vuelven a salir por otro.
Son ya hojas secas, porque entre medias está el verano, y este por lo general, suele hacer daño.
La diferencia entre primavera y otoño son palabras, abrazos ausentes. Respiros profundos y consecuentes. Saber que algo no va bien y cerrar los ojos, como si eso nos fuese a calmar.
Son nuevos textos, nuevas razones de ser, nuevos tonos y nuevos colores.
La verdadera diferencia entre primavera y otoño es desnudarte y querer, sabiendo que la primavera viene, sin avisar, para después con mucho sigilo y burla desaparecer.